Descripción del perfume
Jicky de Guerlain es una fragancia que desafía el concepto del tiempo, ofreciendo a sus usuarios una combinación atemporal de aromas que invitan a un viaje sensorial único. Esta emblemática esencia se abre con notas vibrantes de romero, bergamota, limón (lima ácida) y mandarina, una introducción cítrica que despierta los sentidos y prepara el escenario para un corazón más complejo y profundo.
Al adentrarse en el corazón de Jicky, se descubre una fusión armoniosa de lavanda, haba tonka, raíz de lirio, albahaca, jazmín, y vainilla; este bouquet floral y herbáceo aporta una calidez y una sofisticación que son verdaderamente envolventes. La base de la fragancia, con tonos de cuero, especias, benjuí, sándalo, ámbar, y palo de rosa de Brasil, ofrece un acabado rico y terroso que permanece en la piel, dejando un rastro inolvidable.
Creada en un periodo donde la perfumería comenzaba a explorar nuevas fronteras, Jicky se destaca por ser una propuesta audaz y adelantada a su tiempo. La atomización de esta fragancia es una invitación a experimentar la tradición y la modernidad en un solo gesto, uniendo generaciones a través de un aroma que es tanto fresco como misteriosamente intenso. Jicky de Guerlain, sin duda, es más que un perfume; es una herencia de belleza y complejidad aromática.
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Notas de Corazón
Notas de Base
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Resultados de la Encuesta
Propiedad
La tengo
La tuve
La quiero
Preferencia
Me encanta
Me gusta
Me es indiferente
No me gusta
La odio
Estaciones
Invierno
Primavera
Verano
Otoño
Día
Noche
Longevidad
Escasa
Débil
Moderada
Duradera
Muy duradera
Estela
Suave
Moderada
Pesada
Enorme
Género
Femenino
Unisex femenino
Unisex
Unisex masculino
Masculino
Precio
Extremadamente costoso
Ligeramente costoso
Precio moderado
Buen precio
Excelente precio
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Categoria:
6 comentarios
Sorprendentemente único.
Me ha dejado boquiabierto cómo este perfume, a pesar de ser una creación bastante antigua del siglo XIX, logra mantenerse tan actual y ser perfectamente adecuado tanto para hombres como para mujeres.
Este aroma es totalmente inesperado. Al principio, te recibe con una frescura y una pizca de lo salvaje, gracias al romero, haciendo que pienses que puedes anticipar su camino. Pero justo cuando crees saberlo, cambia el juego revelándote su lavanda. No te confíes, sigue sorprendiéndote al volverse un poco más dulce y, en ese momento, ya estás completamente enganchado, rendido a su encanto suave y discreto, ese que nunca llegas a conocer del todo pero que te hace sentir increíblemente a gusto.
En resumen, es una obra maestra, como «Las Gymnopédies» de Erik Satie, ligera pero poco convencional, que rompe con muchas normas de manera intencionada.
Al rociar el perfume, de inmediato notas el frescor de los cítricos y la lavanda, que dominan la inicial experiencia olfativa, dejando poco espacio para captar otras esencias.
Sin embargo, Jicky no tarda en revelar su riqueza interior, momento en el cual los cítricos y la lavanda dan un paso atrás, permitiendo que la vainilla tome protagonismo, complementada por delicadas pinceladas de cuero y haba tonka.
He tenido la oportunidad de experimentar la versión original de Jicky, aquella con el tapón de vidrio y la etiqueta en azul oscuro y dorado. Esa versión y la actual son muy semejantes, aunque en la primera, las notas iniciales son más suaves, permitiendo que el corazón del perfume brille desde el principio, de forma más cremosa y menos cítrica.
En comparación con Shalimar, Jicky se siente menos intensa en cuanto a incienso y cuero, resultando en una fragancia más suave y cremosa. La lavanda es un diferenciador clave, otorgándole a Jicky una identidad única. Aunque ambas comparten ciertos matices, tienen personalidades distintas.
Definitivamente, es un perfume que no se ajusta a todos los gustos, pero resulta ser sumamente fascinante.
Jicky se ha convertido en mi refugio olfativo, ideal para esos días en que ansío sentirme genuinamente cómodo y atractivo de una forma sutil. Es mi elección predilecta para los meses cálidos, complementando a la perfección un estilo casual pero pulido: una camisa blanca simple, unos jeans, sandalias de cuero y joyería sencilla. Perfectamente adecuado para disfrutar de un desayuno en el exterior un domingo soleado, sumergiéndome en las páginas de un buen libro.
Te lo recomiendo si te atrae la idea de explorar fragancias unisex de aire retro, que mezclan matices de cuero y notas terrosas bajo una capa elegante de lavanda suave y dulce. Sin embargo, es importante mencionar que su fijación y proyección pueden ser modestas en su versión eau de parfum actual.
No estoy muy convencido con este perfume que acabo de probar.
Decidí darle una oportunidad esta noche después de llegar del trabajo y darme una ducha. Me animé a comprarlo sin haberlo probado directamente en mi piel, ya que mi primer encuentro fue a través de un secante y, honestamente, no me terminó de enamorar.
Elegí este perfume porque recientemente he descubierto la marca Guerlain y me daba curiosidad tener uno de sus productos emblemáticos en mi colección.
Mis sentimientos hacia el perfume son bastante encontrados. Por un lado, hay momentos en que me atrae, especialmente porque me trae recuerdos de mis abuelos en las mañanas de domingo, con ese olor a jabón mezclado con lavanda y quizás algo de romero. Por otro lado, hay instantes en que el perfume simplemente no me resulta agradable, y hasta me provoca cierto rechazo.
A pesar de apreciar la calidad de la fragancia y reconocer las notas que contiene, parece que en mi piel no se asienta bien y termina siendo desagradable.
Con el paso del tiempo, noto que el perfume evoluciona en mi piel y aunque empieza a gustarme un poco más, llego a la conclusión de que definitivamente no es para mí.
Incluso me atrevería a sugerir que esta fragancia podría ser más adecuada para un público masculino de 65 años en adelante, sin intención de ofender a nadie. Por mi parte, parece que terminaré utilizando este perfume como un costoso ambientador.
Y es que, aunque parezca curioso, yo disfruto igualmente de aromas tan diversos como Nenuco y Chanel N°5, y me siento genial con ambos.
Sinceramente, este perfume no es para mí.
Si a alguien le interesa intercambiarlo…
Descubrí Jicky de Guerlain y quedé impresionado con su historia rica y legendaria. Comenzando en París en 1928, Guerlain ha creado obras maestras como Eau de Cologne Impériale y Shalimar, maravillas que siguen inspirando el mundo del perfume actual. Los creadores detrás de estas fragancias, desde Pierre-Françoise Pascal Guerlain hasta Jean-Paul Guerlain, demostraron su pasión y maestría en una industria que hoy parece enfocarse más en el lujo superficial que en el arte verdadero. Jicky es una experiencia única en sí misma, con un aroma que desafía las tendencias actuales. Tiene un carácter intensamente rico que mezcla lo frutal, floral y herbal con toques ambarados y especiados. Lanzado en 1889 y revolucionario por su uso de compuestos sintéticos, este perfume sigue destacando en un mar de novedades. No es para todos, definitivamente: su potente mezcla de cítricos, lavanda, y misteriosas notas florales puede resultar abrumadora. Pero para aquellos que buscan algo distintivo y lleno de historia, Jicky es una elección sin par. A pesar de las reformulaciones, conserva su esencia única que sigue deslumbrando en el mundo moderno.